Para saber la medida de tu anillo de una manera muy fácil te recomendamos:
Hacer una tira pequeña de cartón medianamente rígida con un ancho aproximado de 5mm, no te recomendamos usar un hilo o listón porque no tiene la rigidez necesaria para ser lo suficientemente confiable.
Rodea con esta tira el dedo que quieres medir (no olvides que cada dedo tiene medidas diferentes por lo que tienes que hacer esta recomendación en el dedo que quieres usar el anillo) y recorta o haz una marca donde se cierre el círculo de alrededor de tu dedo. Después extiende el cartón y midelo con una regla y según los milímetros que sean busca en la tabla a que medida de anillo equivalen.
Si ya tienes un anillo de la medida que tienes, únicamente tienes que medir el diámetro del anillo (la parte interna de lado a lado) y checar en la tabla la medida a la que equivale.
Según la medida que te dio elige la más acercada a ella, 30, 35, 40, 50, 60, 70 centímetros según el diseño del collar. Así mismo elige si la quieres delgada o gruesa.
En la imagen puedes observar un aproximado de cómo se pueden ver las medidas estándar en algunas personas: Arriba 30 – 40 cm, en medio 50 cm, abajo 60 – 70 cm.
Así mismo existen otros factores, depende mucho del cuidado que le des a las piezas, es importante que cada cierto tiempo se limpie la joyería, algunos productos que usamos cotidianamente pueden darle un aspecto amarillo o negro como la crema, perfume, maquillaje entre otros.
Otro aspecto muy importante es donde se guarda la joyería, toda la joyería se debe de guardar en lugares donde no se tenga mucha humedad, de preferencia en algo cerrado, es por esto que nuestro empaque fue diseñado para que pueda servir también como alhajero.
Trapo sencillo o un trapo con pulimento Es la técnica más común, usar uno como el que viene en nuestro empaque con cada una de sus piezas. Sin embargo la función de estos es específicamente para abrillantar después de que ya se lavó su joyería con alguna otra técnica.
Pasta de dientes
Con un cepillo de dientes blando, de preferencia puedes reusar uno que consideres que ya no sirve. Vas a colocarle pasta de dientes y agua y con ella vas a frotar suavemente tus piezas, cuando termines enjuagar con agua y jabón y secar muy bien.
Jabón para trastes o para las manos
Con un cepillo de dientes blando, de preferencia puedes reusar uno que consideres que ya no sirve. Vas a colocarle el jabón de tu elección mezclado con agua, vas a frotar suavemente tus piezas con el cepillo de dientes y la mezcla, cuando termines enjuagar y secar muy bien.